Y así como las empresas se adhieren al cambio y las buenas prácticas en pos de cuidar el planeta, los consumidores han tomado un rol fundamental, ya que son quienes exigen un mayor control a estas sobre el impacto medioambiental que generan.
La necesidad es urgente: preservar los recursos y cuidar el medio ambiente para las generaciones futuras. La construcción sustentable es una de las áreas que ha empleado cambios importantes en Chile. A pesar de que han habido avances relevantes en la eficiencia energética con la integración de energías renovables, el desafío es aún más grande, y tiene que ver con medidas concretas que ayuden a mitigar las consecuencias del cambio climático, reducir la huella de carbono e integrar la economía circular al sector productivo, según el programa de sostenibilidad Construye2025, un programa impulsado por Corfo que busca transformar al sector de la construcción desde la productividad y la sustentabilidad, para lograr un desarrollo nacional impactando en forma positiva en los ámbitos social, económico y medioambiental.
Llevando el impacto de la industria de la construcción a datos, a nivel mundial genera alrededor del 7% de las emisiones de CO2 solo durante la construcción. Según datos internacionales completos, si esto se lleva a toda la vida útil de un proyecto, este sería responsable del 40% de emisiones y demandaría un 30% de energías; señala el Consejo de Productividad, Innovación y Construcción Sustentable (CPICS) de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
Chile como un país económicamente abierto al mundo
La llegada de la 25ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático significa una secuencia de transformaciones a nivel nacional, y una gran oportunidad no solo para la industria de la construcción, sino que también en otros sectores, ya que estar inmersos en esta tendencia mundial nos hace prestar cada vez más atención a la propia huella de carbono que dejamos como sociedad.
¿Y qué hay de los costos al unirse a esta tendencia sustentable? Según el CPICS de la Cámara chilena de la Construcción, “la tecnología existente permite que unirse a esta tendencia no sea más costoso, al contrario, probablemente sea más barato desde la perspectiva de vida útil, porque se pueden ahorrar costes de calefacción o agua, ahí es donde las empresas pueden hacer una gran aportación, poniendo en práctica los conocimientos que existen hoy.
El comienzo de todo
El 2012 marcó un antes y un después en términos de construcción sustentable en nuestro país, fue donde se comenzó a hablar de eficiencia energética con el fin de desacoplar el incremento de consumo de energía respecto al crecimiento del PIB.
Así se crearon las primeras bases de la construcción sustentable en Chile, sumándose a esto el desarrollo de fuentes de energía limpia y renovable, habitabilidad y confort ambiental.
Hace unos años, se entendía por edificación sustentable la eficiencia energética y la calidad del ambiente del usuario, pero se ha ampliado y actualmente se habla de gases de efecto invernadero, eficiencia del uso del agua y de los materiales.
Hoy queremos destacar 3 iniciativas que contribuyen al desarrollo de la construcción sustentable en Chile:
Construye 2025: un referente estratégico para la construcción, que une y articula a los sectores público, privado y la academia para trabajar en iniciativas de largo plazo para una industria más sustentable, productiva y competitiva. Puedes conocer todas sus iniciativas y proyectos para el sector aquí.
Certificación Edificio Sustentable: La “Certificación Edificio Sustentable” permite evaluar, calificar y certificar el comportamiento ambiental de edificios de uso público en Chile, tanto nuevos como existentes, sin diferenciar administración o propiedad pública o privada.
Se basa en el cumplimiento de un conjunto de variables, desagregadas en requerimientos obligatorios y voluntarios que entregan puntaje. Para certificarse, se debe cumplir con los requerimientos obligatorios y tener como mínimo 30 puntos. El máximo puntaje es 100. Puedes conocer más aquí.
Corfo: este organismo trabaja a lo largo de todo Chile apoyando el emprendimiento, la innovación y la competitividad, fortaleciendo, además, el capital humano y las capacidades tecnológicas, teniendo como principal objetivo promover una sociedad de más y mejores oportunidades para contribuir al desarrollo económico del país. En este contexto, CORFO se encarga de potenciar el desarrollo de iniciativas que permitan resolver desafíos de productividad de las empresas, pero a través de mecanismos de colaboración con entidades especializadas. Un claro ejemplo es la iniciativa que vimos anteriormente, Construye2025.
Si bien hemos avanzado, aún queda mucho camino por recorrer en términos de construcción sustentable, y serán las mismas empresas quienes conviertan estos desafíos en oportunidades, destacando su valor e integrándolos dentro de sus proyectos, negocios y futuros retos.